Por Mar Buendía
*Alejandra Lagunes y Raúl Bolaños-Cacho presentan proyecto para prevenir discapacidad auditiva
Coneme / Ante los daños que ocasiona en la población infantil y adolescente la exposición al exceso de ruido y para prevenir en ese sector discapacidades auditivas, la senadora Alejandra Lagunes Soto Ruíz y el senador Raúl Bolaños-Cacho Cué consideraron que se requieren medidas de prevención para estos problemas cuando en espectáculos públicos se superen los 80 decibeles.
Explicaron que es en edades tempranas cuando se pueden detectar y prevenir los problemas de salud relacionados con la exposición del ruido, situación que entre otros casos se da en conciertos o diversos eventos y bajo un tiempo prolongado.
Por eso, los legisladores plantearon una reforma al artículo 50 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, a fin de que las autoridades federales, de los estados, municipales y de las demarcaciones territoriales de la Ciudad de México, se coordinen para establecer medidas de prevención en espectáculos públicos que superen los 80 decibeles, a efecto de prevenir y reducir la aparición de discapacidades auditivas los menores.
En el proyecto, que publicaron en la Gaceta Parlamentaria de la Comisión Permanente, el pasado 11 de enero, los senadores destacaron que datos de la Organización de las Naciones Unidas estiman que para 2050 un cuarto de la población mundial perderá la audición por causas prevenibles como lesiones, enfermedades infecciosas y la exposición a música o eventos públicos de alto volumen.
La pérdida auditiva ocasionada por el ruido ya es un problema de salud pública en México, señalaron los senadores, pues en 2021, 2.3 millones de personas padecían de una discapacidad relacionada con estos factores.
Lo cual se respalda con un informe de la Organización Mundial de la Salud, que señala que el 60 por ciento de las niñas y los niños sufren de pérdida de audición por complicaciones que pueden ser prevenidas.
Por lo tanto, Alejandra Lagunes Soto Ruíz y Raúl Bolaños-Cacho Cué urgen a considerar la salud auditiva desde edades tempranas, ya que es cuando se producen lesiones que pueden ser evitadas y afectan el acceso a la educación de niñas, niños y adolescentes.
A nivel internacional, apuntaron, se han emitido recomendaciones para reducir la pérdida de audición, como son la vacunación, las prácticas de atención materna y puericultura, la detección y el tratamiento de afecciones comunes del oído y los programas de protección de la audición ante la exposición de ruidos fuertes en entornos de ocio.
Sin embargo, en México los niveles de ruido están por encima de los valores recomendados por la OMS, cuyo valor es de 70 decibeles.