Por Dany García
Coneme / En el marco del compromiso de promover todo tipo de investigaciones desde una perspectiva histórica sobre el periodo de la llamada guerra sucia para generar una cultura de paz y respeto a los derechos humanos, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revoluciones de México (Inehrm), invita a la conferencia en línea: “Las mujeres en el asalto al cuartel de Madera, el 23 de septiembre de 1965”, la cual será impartida por la escritora e historiadora Nithia Castorena-Sáenz.
La disertación virtual forma parte del Seminario interinstitucional Historia del Presente y será transmitida por las redes institucionales del organismo en Facebook (/inehrm.fanpage), en Twitter (@inehrm) y en YouTube (Canal Inehrm), el jueves 22 de septiembre a las 17:00 horas.
Los años sesenta y gran parte de los setenta mexicanos fueron protagonistas de la rebeldía social y de una guerra soterrada contra las guerrillas campesinas y urbanas, la persecución de comunistas y la ejecución de diversos mecanismos de espionaje contra personas consideradas opositoras al régimen gobernante.
El Estado mexicano de ese tiempo tenía las herramientas para enfrentar ese desafío por la vía del derecho, el diálogo y la negociación, pero no lo hizo, y eligió otro camino inhumano, cruel y autoritario, para eliminar a sus opositores por medio de su desaparición forzada o su ejecución sumaria, con el uso de tortura y represión sistemática, como demuestran diversos estudios, indagatorias, testimonios y miles de documentos de archivos históricos.
En este panorama, cuando se refiere la lucha armada de guerrillas urbanas o campesinas, durante la segunda mitad del siglo XX mexicano, por lo general se excluye o se margina a las mujeres de la narrativa histórica de la época, incluso de aquella dedicada a tratar de manera exclusiva el tema de los grupos armados, como señala en su ensayo: Las mujeres en el asalto al cuartel de Madera, el 23 de septiembre de 1965, la historiadora Castorena-Sáenz.
En su análisis histórico, desde la perspectiva de género, del Grupo Popular Guerrillero (GPG), responsable del ataque al cuartel de Madera, la historiadora buscó respuestas a las preguntas: “¿qué papel desarrollaron las mujeres en este grupo?, ¿qué formas de participación tuvieron?, ¿qué consecuencias diferenciadas vivieron por esta participación?, ¿cómo se involucraron en estos procesos?, ¿cómo se relacionaron las mujeres con los hombres del GPG?, ¿cómo fueron las relaciones de pareja de un hombre integrante del GPG con una mujer que no pertenecía a él?”.
La docente de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Chihuahua incluyó en su estudio sobre la participación de las mujeres a quienes se se unieron directamente a grupos armados, y a quienes “se vieron involucradas a través de relaciones personales con los hombres integrados directamente en estos grupos, como es el caso del GPG, para el cual se hará énfasis en las tareas u obligaciones que asumieron y las consecuencias que éstas les generaron”.
La también autora de la tesis de maestría en historia: Estaban ahí. Las mujeres en los grupos armados de Chihuahua (1965-1972) señala que las mujeres “se hicieron responsable de alojar y/o proteger a guerrilleros que estaban huyendo, o se vieron obligadas a la manutención y crianza de sus hijas e hijos cuando sus compañeros sentimentales se integraron de lleno en una vida clandestina propia de la guerrilla, o cuando murieron por su participación en esta”.
La especialista considera que traer a las mujeres al centro de la narración “dejará al descubierto que, para poder ser activas políticamente (en esta idea del ser-sujeto), ellas debieron construir resistencias e idear estrategias”.
Las circunstancias históricas del grupo guerrillero, señala Nithia Castorena, son “un claro ejemplo de las ocasiones en las que ni siquiera se plantearon pertenecer a los grupos armados, pero se vieron involucradas en ellos, enfrentando de este modo los mismos riesgos que los varones (con los que se relacionaban sobre todo por relaciones sentimentales y familiares) y aún más, por el solo hecho de ser mujeres”.
La historiadora subraya las consecuencias de esa vinculación: “estas fueron diferenciadas de las que vivieron los hombres, sobre todo relacionadas con la crianza y manutención de las hijas e hijos, la vida en condiciones de viudez y el cerco de represión sobre ellas”.
Sobre la intención de la investigación, Castorena-Saénz explica que no fue “hacer historia de mujeres famosas, o apologías por su condición de género, sino reconstruir esa parte de la historia de una forma más integral”. Y concluye: “No diezma el reconocimiento a las personas que entregaron su vida y su muerte a la causa de su lucha por tierra y justicia el hecho de reconocer que no fueron ellos los únicos actores de estos eventos”.
Para conocer más sobre la participación de las mujeres en el Asalto al cuartel de Madera, el 23 de septiembre de 1965, te esperamos en la conferencia virtual de Nithia Castorena-Saénz, el jueves 22 de septiembre a las 17:00 horas.
Para mayor información consulta www.inehrm.gob.mx y las redes sociales: en Twitter (@INEHRM), en Facebook (/inehrm.fanpage) y en YouTube (Canal INEHRM).