Por Dany García

*Se reconocerá su trayectoria artística este lunes a las 17:00 en el Palacio de Bellas Artes

Coneme / La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) lamentan el fallecimiento del artista plástico Rafael Cauduro. El jugueteo con la realidad característico dentro de sus obras es un referente del hiperrealismo nacional.

La secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, lamentó el deceso de Rafael Cauduro, a quien consideró uno de los mejores artistas plásticos, de los más importantes del mundo, nos deja su obra y su mirada crítica plasmada en sus murales.

A su vez, la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López, expresó: se ha marchado uno de los pintores y muralistas más destacados. Rafael Cauduro deja una vasta obra, testimonio de varias décadas de trabajo artístico.

Al tiempo de enviar condolencias a su familia y colegas, la titular del Inbal afirmó que la obra de Rafael Cauduro en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)constituye un referente crítico a la procuración de justicia.

Entre sus obras más relevantes se encuentra el mural Los siete crímenes mayores, ubicado en el recinto que alberga la SCJN, el cual es un recordatorio a la importancia de la procuración de justicia en el país.

Para rememorar su trayectoria, el lunes 5 de diciembre de 2022, a las 17:00 horas, recibirá un homenaje póstumo en el Palacio de Bellas Artes, en acuerdo con su familia.

Trayectoria e influencias

Rafael Alejandro Cauduro Alcántara nació en la Ciudad de México el 18 de abril de 1950. Sus padres, Víctor y Elena, eran apasionados del arte, especialmente del Renacimiento. Esto hizo que Rafael, el menor de seis hermanos, creciera rodeado de un ambiente en el que lo estético tenía un gran valor. Sin embargo, optó por estudiar arquitectura y diseño en la Universidad Iberoamericana para cumplir con las exigencias de su familia de tener una carrera formal.

El contexto artístico en el México de los años setenta del siglo pasado fue complejo y a la vez fructífero, lo cual ayudó a que Cauduro formara sus ideas políticas y filosóficas desde temprana edad, mismas que continuó desarrollando de manera independiente a lo largo de su carrera.

Al reconocerse como artista y abandonar la carrera universitaria se mudó a Cuernavaca, Morelos. Entre sus aportaciones más importantes se encuentran la calidad de su dibujo y el desarrollo de técnicas y materiales ajenos a lo tradicional en las artes visuales para crear espacios expansivos que, a la vez, desafiaban las tendencias establecidas.

Su primera exhibición fue en 1976 en la Casa del Lago. En 1995 inauguró su más importante exposición en el Museo del Palacio de Bellas Artes, recinto de la Red de Museos del Inbal, donde se mostró la obra de un artista con un estilo maduro. Recientemente se presentó la exposición retrospectiva “Un Cauduro es un Cauduro (es un Cauduro)” en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, la cual se muestra actualmente en el Museo Morelense de Arte Contemporáneo Juan Soriano, en Cuernavaca, hasta finales de enero de 2024.

Además de su vasta obra de caballete, ha creado murales como Escenarios subterráneos, en la estación del Metro Insurgentes; El condominio, en el Edificio Cauduro en la colonia Roma, además del mural en la escalinata de la SCJN.

Así, Rafael Cauduro deja un vasto legado que ha logrado tocar sensiblemente a millones de mexicanos por su inigualable visión crítica de la sociedad mexicana.