Por Dany García
-Celebró una década de trabajo conjunto con el pianista Ángel Rodríguez
-María Hanneman, destacada estudiante del Conservatorio Nacional de Música, acompañó al tenor veracruzano
-El recital fue transmitido en vivo por Canal 22 para que pudiera ser disfrutado por mayor número de personas
Coneme / Ante un público cautivado por la fuerza y emotividad de su voz, el tenor Javier Camarena cerró su exitosa gira por México con el recital “Tiempo de cantar” en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, donde regaló a su público este magno concierto en el que fue acompañado al piano por la destacada estudiante del Conservatorio Nacional de Música (CNM) María Hanneman y Ángel Rodríguez.
Considerado una de las voces operísticas fundamentales a nivel mundial, su presencia en el recinto de mármol atrajo a un público ávido de disfrutar en vivo este concierto que forma parte de la estrategia #VolverAVerte de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y del Programa de Reactivación Musical del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), para el cual se pusieron en marcha los protocolos para el cuidado de la salud de audiencias, elencos y personas trabajadoras en el recinto.
La secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, afirmó: “es un gusto y un honor volver a tener a Javier Camarena, una de las voces más hermosas y potentes que tenemos en México, en el Palacio de Bellas Artes, celebrando 10 años de colaboración con Ángel Rodríguez. Querido Javier Camarena, disfrutar de tu talento y generosidad, al compartir el escenario con María Hanneman, una nobel y virtuosa pianista, fue un abrazo para el alma. ¡Felicidades!”.
La directora general del INBAL, Lucina Jiménez, expresó: «la presencia de Javier Camarena en el Palacio de Bellas Artes es un encuentro con el escenario que lo vio nacer, por lo que es su regreso a casa. Es un honor para nuestro país tener nuevamente, en el máximo recinto cultural de México, a quien es considerado en la actualidad el mejor cantante lírico del mundo, acompañado de un gran pianista, Ángel Rodríguez. En esta ocasión, conjuntó un programa con obras de algunos de los autores más importantes para la voz humana. Es de destacar el acento que Camarena pone en la música mexicana, en sus frecuentes presentaciones en los mejores escenarios internacionales”.
Emocionado de volver a los escenarios, y en el máximo recinto cultural de México, después de la pausa por el confinamiento sanitario, Javier Camarena sumó un éxito más a su larga trayectoria artística acompañado del pianista Ángel Rodríguez, con quien celebra una década de colaboración.
La generosidad del tenor veracruzano también hizo posible que la Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el INBAL, en colaboración con el Canal 22 en su frecuencia. 22.2 y el Sistema Público de Radio y Televisión (SPR), a través del Canal 14, transmitieran en vivo esta gala operística y, a la par, se compartiera en directo a través las redes sociales de estas instituciones.
Aplausos y exclamaciones de admiración coronaron cada una de las obras por su interpretación que conformaron el programa musical, el cual incluyó arias de ópera, romanzas, zarzuela y latinoamericana. Sonetti di Petrarca, de Franz Liszt; Serenata, de Pietro Mascagni; Il tuo sguardo, de Seis baladas para canto y piano, de Isaac Albéniz, y Canto porque estoy alegre (homenaje a Gayarre), de Antón García Abril, fueron algunos de los temas que interpretó con su depurada técnica vocal.
El recital se hizo más emotivo con las obras de los compositores mexicanos, como L’ultimo mio sospir, de Melesio Morales; Madre mía, cuando muera y Arrullo, de Blas Galindo, y Gavota, de Manuel M. Ponce, esta última la interpretó María Hanneman, estudiante de la Cátedra Ricardo Castro del Conservatorio Nacional de Música quien ejecutó también, Grande Valse Brillante Op. 18 en Mi bemol mayor, de Federico Chopin, y Lo spazzacamino, de 6 Romanze, de Giuseppe Verdi.
Javier Camarena regresó al Palacio de Bellas Artes para cerrar su reencuentro con el público mexicano, en el mismo escenario donde celebró, en febrero de 2020, los 15 años de su debut con una versión semiescenificada de La hija del regimiento, de Gaetano Donizetti.
Y ante la prolongada ovación, el tenor regaló un encore con las canciones populares La malagueña, de Pedro Galindo y Elpidio Ramírez, y Serenata huasteca, de José Alfredo Jiménez, ambas con arreglos del pianista Ángel Rodríguez. Ante el prolongado aplauso de su público en el Palacio de Bellas Artes y las audiencias viéndolo a través de las pantallas de sus hogares, Camarena concluyó la gira, “Tiempos de cantar” y se despidió de México, con la aria ¡Ah! mes amis de la ópera La hija del regimiento de Donizetti.