Por Elizabeth Vaca
-Es necesario que en los espacios públicos se fomenten respeto, cooperación, participación y solidaridad entre las personas: Alcocer Varela
-El objetivo del PMU es lograr espacios públicos seguros, saludables y abiertos a la comunidad
-Atiende a más de 100 municipios y ha beneficiado a más de cinco millones de personas
-El convenio está enfocado en ofrecer espacios seguros y de protección en zonas de alta vulnerabilidad que contribuyan a evitar el consumo de sustancias psicoactivas
Coneme / Las secretarías de Salud y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), firmaron un convenio de colaboración con el objetivo de contribuir a reducir las condiciones de rezago urbano y social, así como las adicciones, mediante la mejora de espacios públicos y acceso a bienes y servicios. A través de la articulación interinstitucional se podrán conjuntar voluntades, acciones, capacidades y recursos dirigidos a la promoción y difusión para mejorar los espacios públicos y cerrar las brechas de desigualdad, así como fomentar la tolerancia, respeto, cooperación, participación y solidaridad.
Al atestiguar la firma entre la Sedatu y la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), el Secretariado Técnico del Consejo Nacional de Salud Mental (STCONSAME) y los de Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP), el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, afirmó que las ciudades brindan oportunidades de crecimiento, desarrollo y bienestar; sin embargo, las y los habitantes enfrentan desafíos de salud relacionados con el abastecimiento y calidad del agua, ambiente contaminado, violencia, lesiones y acceso a sustancias como tabaco, alcohol y dietas ultraprocesadas.
Alcocer Varela destacó que la salud de las personas está determinada por el entorno en el que se desarrollan, resultando particularmente afectadas las personas de más bajos recursos, quienes carecen de acceso a servicios básicos. En la ceremonia, que se realizó en la Sala “Guillermo Soberón”, de la Secretaría de Salud, el secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Román Meyer Falcón, resaltó que a través del Programa de Mejoramiento Urbano (PMU), y en coordinación con los tres órdenes de gobierno, se han realizado en el país más de 700 obras para avanzar en el desarrollo de las regiones con alto índice de marginación:
“Si pensamos en el espacio público como un mecanismo clave para poder disminuir problemas de adicciones y salud se debe poner atención en el tema de planeación, debemos considerar cómo los municipios pueden mejorar sus políticas para tener mejores espacios públicos y servicios básicos”. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, recordó que el consumo de drogas es un problema de salud pública; por ello, la Estrategia Nacional para la Prevención de las Adicciones (ENPA) Juntos por la Paz, aborda el tema desde una visión humanista y social.
El cambio significativo en los factores sociales y estructurales que generan problema de adicciones, depende de la colaboración de múltiples dependencias de gobierno y actores sociales, precisó. Agradeció la disposición, entusiasmo y dedicación de instituciones del gobierno para impulsar la estrategia que tiene el objetivo de avanzar hacia condiciones de igualdad social, acceder a la convivencia y al desarrollo cultural. El subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Sedatu, Daniel Fajardo Ortiz, explicó que el objetivo del PMU es lograr espacios públicos seguros, saludables y abiertos a la comunidad. Atiende a más de 100 municipios y ha beneficiado a más de cinco millones de personas.
No es solo la firma en papel, aseguró, ya se tienen acciones concretas en territorio como la conformación de 345 comités comunitarios en el país, integrados por personas que se capacitan para contribuir a garantizar espacios seguros, afirmó. El director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica, Juan Manuel Quijada Gaytán, calificó como inédita la firma de este convenio, pues desde que se instrumentó la ENPA, uno de los ejes determinantes fue proteger la salud mental y prevenir el consumo de sustancias psicoactivas por parte de niñas, niños y adolescentes. Dijo que se trata de cambiar esta realidad al ofrecer espacios seguros y de protección en zonas de alta vulnerabilidad de norte a sur del país, que contribuyan a evitar el consumo de sustancias psicoactivas entre la población infantil y adolescente, sobre todo, la que vive en zonas marginadas y está más expuesta.