Por María Esther Beltrán Martínez
Coneme/ Málaga, España.- Quedan cortos los adjetivos calificativos de excelencia y renovación, para describir la puesta en escena de La discreta enamorada del escritor Lope de Vega, que estrenó la Compañía Nacional de Teatro Clásico en el Teatro del Soho CaixaBank.
Fueron aproximadamente 120 minutos de disfrutar de una obra renovada y original bajo la dirección del actor Lluis Homar.
La discreta enamorada, una de las comedias amorosas de enredos reconocida del escritor español, Félix Lope de Vega;considerado como uno de los poetas y dramaturgos más destacados del Siglo de Oro español, es una esperanza de que el teatro clásico pueda ser visto y entendido por todo tipo de público.
La compañía de teatro la conforman jóvenes actores con un talento tremendo, que si bien era su primera actuación y mostraron la sublimidad en sus actuaciones se tiene asegurado que en el futuro se consoliden como grandes figuras de la escena.
El reparto está compuesto Íñigo Arricibita, Xavi Caudevilla, Montse Diez, Cristina García, Ania Hernández, Nora Hernández, Antonio Hernández Fimia, Lluís Homar, Pacual Laborda, Cristina
Marín-Miró, Felipe Muñoz, Mirian Queba, María Rasco y Marc Servera.
El trabajo de dirección que realiza Homar es renovado, dirige a las actrices y actores jóvenes y hacen una comunión actoral junto con la actriz Montse Diez. El resultado es una obra viva que se disfruta desde el inicio al final.
Un elemento que se integra en la obra es la música en vivo bajo la autoría de Marc Servera, además de composiciones originales, incluye la versión Vestida de nit, de Silvia Pérez Cruz.
Homar señala que: “Lope construye una fascinante comedia de enredos, con una profundidad y complejidad de caracteres inaudita, que han hecho de La discreta enamorada una de sus grandes creaciones”, lo que agregamos es que sin duda alguna su dirección hace posible que el público disfrute de una obra clásica en verso y al final ovaciones por varios minutos agradeciendo el talento y la generosidad de dar una obra sublime.