Por Dany García

*La distinción establece que el patrimonio documental y sonoro de estos acervos es único dentro de todos los repositorios de nuestro país

*La “Colección Antigua” aloja 900 volúmenes del siglo XVI al XX, y el “Archivo de la Palabra”, 608 entrevistas a veteranos de la Revolución, exiliados españoles y otros personajes

Coneme / Desde manuscritos del siglo XVI hasta decretos del Segundo Imperio Mexicano, pasando por las voces de veteranos zapatistas y refugiados españoles de mediados del siglo XX, son algunos de los tesoros que resguarda la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia (BNAH), los cuales hoy, junto con otros 12 acervos documentales, fueron oficialmente reconocidos como “Memoria del Mundo” de México, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

La distinción otorgada a la “Colección Antigua” y al “Archivo de la Palabra”, bajo custodia de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y de la BNAH, es conferida por el Comité Mexicano de Memoria del Mundo (CMMM), debido a la importancia de su contenido, adecuada preservación, gestión, consulta y difusión.

Durante el acto, celebrado en el marco de la 44 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, la presidenta de la mesa directiva del CMMM, Catherine Bloch Gerschel, expresó su beneplácito por la distinción a 14 nuevos registros nacionales, -incluyendo los dos de la BNAH- que ahora suman 89 patrimonios documentales de México, los cuales el público podrá consultar en los próximos días en la página http://www.memoriadelmundo.org.mx/.

Acompañada de la representante de México en el Comité Regional de Latinoamérica y el Caribe del Programa Memoria del Mundo de la Unesco, Martha Romero Ramírez; la  oficial nacional de Comunicación e Información de la Unesco, Viridiana García Martignon; el representante la Comisión Mexicana de Cooperación con la Unesco, Jorge Tlatelpa Meléndez, y el vicepresidente del Comité Mexicano del Programa Memoria del Mundo, Baltazar Brito Guadarrama, señaló que las propuestas fueron analizadas por 43 dictaminadores.

En representación del director general del INAH, Diego Prieto Hernández, el diploma de la “Colección Antigua” fue recibido por el encargado de dicho repositorio, Genaro Díaz Fuentes; mientras que el del “Archivo de la Palabra”, por la titular de la Dirección de Estudios Históricos del INAH, Delia Salazar Anaya.

Con este estatus, el CMMM ratifica que ambas colecciones son únicas e irremplazables, toda vez que las características, antigüedad y el contenido de sus textos y archivos sonoros, respectivamente, no son replicadas en ningún otro repositorio de México.

Cabe destacar que la Unesco distingue tres niveles de Memoria del Mundo: de carácter nacional, de alcance regional –latinoamericano para el caso de México– y universal.

Además de este par de distinciones como “Memoria del Mundo” de México, la BNAH cuenta con otras dos designaciones nacionales, concedidas, en 2010 y 2018, a los álbumes fotográficos de su fototeca y a la “Colección de Ignacio Ramírez ‘El Nigromante’”.

Asimismo, en 1997, la BNAH obtuvo el reconocimiento como “Memoria del Mundo Universal” para su colección de códices, la cual integra decenas de documentos pictóricos, entre originales y copias históricas, las cuales datan de la época virreinal e, incluso, de tiempos prehispánicos.

Acervos únicos

A inicios del pasado 2022, las y los trabajadores de la BNAH, Miroslava Rosales Ferra, Rosalba Sánchez Flores, Yosajandi Huerta Avendaño y Marco Antonio Tovar Ortiz elaboraron los expedientes con los cuales se solicitó al CMMM el reconocimiento de la “Colección Antigua” y del “Archivo de la Palabra” como “Memoria del Mundo” de México.

Sobre el contenido de ambos acervos, el historiador adscrito a la dirección de la BNAH, Juan Carlos Franco Montes de Oca, comentó que la “Colección Antigua” está integrada por 900 volúmenes que van del siglo XVI a inicios del XX. Entre estos se resguardan 34 obras en lenguas indígenas, 22 libros virreinales de tipo genealógico –cartas ejecutorias de hidalguía o certificaciones de sangre– y una colección de decretos presidenciales, la cual abarca de 1825, en el gobierno de Guadalupe Victoria, a 1867, hacia el final del imperio de Maximiliano de Habsburgo.

En tanto, el “Archivo de la Palabra” se constituye de 608 entrevistas hechas por antropólogos e historiadores, entre las décadas de 1970 y 1980, a personajes que participaron en la Revolución Mexicana o en el zapatismo; a refugiados de la Guerra Civil española; a médicos de mediados del siglo XX y a trabajadores de la época dorada del cine nacional.

Cabe destacar que, sobre estos repositorios, el INAH realiza acciones constantes de conservación, a través del Taller de Restauración de la BNAH. Asimismo, el “Archivo de la Palabra” cuenta con respaldos en discos compactos y discos duros, amén que el personal de la biblioteca ha iniciado la digitalización de la “Colección Antigua”, en aras de facilitar su consulta y evitar la manipulación directa de los documentos históricos.

Video:

https://we.tl/t-d6ypoZ9drP?utm_campaign=TRN_TDL_05&utm_source=sendgrid&utm_medium=email&trk=TRN_TDL_05