Por Mar Buendía
*Piden fortalecer mecanismos de inspección en centros laborales donde se presentan con mayor frecuencia este tipo de casos
Coneme / Los migrantes que son menores de edad están expuestos a explotación laboral, donde pueden sufrir maltratos, aislamiento y violencia, lo que les restringe sus derechos y limita sus oportunidades para el futuro, aseguraron senadoras del Grupo Parlamentario del PT.
Por tal motivo, las legisladoras presentaron un punto de acuerdo para que el Instituto Nacional de Migración redoble esfuerzos en la protección de niñas, niños y adolescentes migrantes, y se eviten toda forma de explotación infantil.
De igual forma, hicieron un llamado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, así como a sus homólogas en las 32 entidades federativas, para que fortalezcan los mecanismos de inspección en centros laborales donde se presentan con mayor frecuencia casos de explotación laboral infantil.
La propuesta, que se publicó en la Gaceta Parlamentaria de la Comisión Permanente, también busca que dicha Secretaría difunda o, en su caso, elabore programas para concientizar, prevenir y erradicar el trabajo infantil, mediante una campaña masiva en medios de comunicación.
“El trabajo infantil merma el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes; además, da lugar a círculos intergeneracionales de pobreza y desigualdad”, manifestaron.
Refirieron que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil 2019, en nuestro país, 3.3 millones de niños y niñas de cinco a 17 años se encuentran en condiciones de trabajo infantil, lo que representa una tasa de 11.5 por ciento.
Además, subrayaron que en México hay una población infantil y adolescente migrante que vienen en busca de trabajo para mejorar las condiciones por las que se vieron obligados a salir de su país de origen. De acuerdo con la organización Save The Children, en 2021 el número de menores migrantes fue de 29 mil 467.
Este sector, aseveraron las senadoras, se encuentra en una doble vulnerabilidad, por el hecho de ser migrantes y al mismo tiempo menores de edad, además de que en muchas ocasiones migran sin sus padres o madres.
En ocasiones migrar pueda ofrecerles una vida mejor, pero también representa un riesgo, ya que al hacerlo sin documentos se les impide tener acceso a servicios básicos y lo único que les queda es buscar fuentes de ingreso, por lo que se vuelven susceptibles de trabajo infantil informal y explotación, puntualizaron.