Por Mar Buendía
*Necesario profesionalizarlo en este sentido para que modifique la manera de ejecutar diligencias en la investigación de hechos ofensivos contra las mujeres: dip. Ana Karina Rojo Pimentel
* Inaplazable fortalecer sus facultades con esta herramienta y combatir de mejor manera y eficientemente las agresiones y violencia en contra del sector femenino de México, aseveró
Coneme / Con el objetivo de que el personal que componen las fiscalías y procuradurías de los estados sea idóneo, adecuado y no haga a un lado los derechos humanos de las personas, la diputada federal Ana Karina Rojo Pimentel, presentó iniciativa que reforma la Ley de la Fiscalía General de la República (FGR), para que éste sea capacitado, desde la cadena de mando hasta las direcciones generales que dependen de estos cargos, en perspectiva de género.
Al respecto, la legisladora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) señaló la necesidad de profesionalizarlo para que modifique la manera de ejecutar diligencias, tome en cuenta las circunstancias socioculturales actuales, especializando a las instituciones de procuración de justicia, generando una mejora continua y se logre un impacto positivo a corto, mediano y largo plazo en la investigación de hechos ofensivos contra las mujeres.
La congresista detalló que la propuesta expuesta fortalecerá y podrá eficientar las facultades y obligaciones de la Fiscalía General de la República en materia de perspectiva de género, para combatir de mejor manera las agresiones y violencia que sufre día a día el sector femenino de México.
Lamentó que, si bien los cambios legislativos y jurisprudenciales han tenido impactos en la conducta de las autoridades, han sido insuficientes porque no han contrarrestado la incidencia delictiva y, a esto, se le agrega un sistema de justicia que no reacciona positivamente y perjudica a las afectadas al revictimizarlas, por lo que la reforma presentada coadyuvará en una mejora en cuanto al trato hacia ellas.
“Es indiscutible la obligación del Estado de actuar con respeto a los derechos fundamentales, lo que implica la aplicación de la perspectiva de género en los casos en que así sea necesario; una de las mayores dificultades en la procuración y administración de justicia es lograr la sensibilización de quienes, desde lo jurídico y lo técnico-científico, intervienen, en especial cuando las víctimas se encuentran en vulnerabilidad por razones de género”, finalizó.