Por Elizabeth Vaca
Coneme / DIPUTADO SANTIAGO CREEL MIRANDA
Presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados
Mensaje en la clausura de la XVI Reunión Interparlamentaria España-México.
Muchas gracias, presidente, muchas gracias Ander.
Quiero empezar por decir dos palabras dos veces, muchas, muchas gracias, las cuales, estoy seguro, expresan el sentimiento de senadoras, senadores, diputadas y diputados de México que han estado presentes en esta Reunión Interparlamentaria.
Quiero agradecer de manera muy muy especial a mi contraparte en el Congreso de los Diputados, (no está presente, pero por favor aquí hay diputadas y diputados) que le transmitan mi agradecimiento a la presidenta del Congreso de los Diputados, a la diputada Meritxell Batet Lamaña.
Y transmitirle nuestro agradecimiento también y, por supuesto, a nuestro anfitrión aquí presente, al senador Ander Gil García, presidente del Senado de España, le agradecemos infinitamente, presidente. Te agradecemos tu anfitrionía, la manera como nos has recibido en este Salón de los Pasos Perdidos, no tenemos nosotros esa expresión en México, pero de ninguna manera significa lo que hicimos el día de hoy, porque lo que menos hicimos fue perdernos; creo que nos concentramos bastante bien en cada uno de los temas; sin embargo, sí apunto que es un término nuevo para nosotros.
Ha sido, sin lugar a duda, un día intenso, de labores, deliberación y cooperación y también cordialidad y amistad. Todo esto con un fin común: el de fortalecer nuestra diplomacia parlamentaria y así poder tomar provecho de las grandes oportunidades que tenemos enfrente y, a la vez, de resolver las problemáticas que atravesamos.
Las y los parlamentarios españoles y mexicanos debemos enfrentar exitosamente los retos que hemos identificado a lo largo del día de hoy en las diversas sesiones de trabajo, que el espíritu que hoy se vivió en estas jornadas continúe hasta la XVII Reunión Interparlamentaria México-España, que se llevará a cabo en nuestro país.
Y quiero anticiparles a las y los parlamentarios españoles que estoy seguro que apenas lleguen a nuestro territorio y pisen suelo mexicano, se sentirán en su casa auténticamente -nuestra casa es vuestra casa- como nosotros nos hemos sentido aquí, todas y todos nosotros, aunque estamos en el extranjero, en España, nos sentimos en casa.
Nos llevamos a nuestra patria como un activo muy valioso las conclusiones a las que hemos arribado en materia cooperación económica, comercial, de igualdad, educación, salud y cultura, el cambio climático también y, por supuesto, en materia de fortalecimiento al Estado de derecho y en materia de seguridad.
El diálogo que sostuvimos ha profundizado el entendimiento entre las delegaciones de las Cortes Generales de España y el Honorable Congreso de la Unión de los Estados Unidos Mexicanos.
Hacemos votos para la concreción del Acuerdo Global entre México y la Unión Europea, el cual intensificará los intercambios bilaterales en beneficio de nuestros pueblos, se lleve a cabo lo más pronto que sea posible. Será, sin duda, una herramienta invaluable que nos permitirá superar los problemas que pueden presentarse en materia de comercio, de inversión, de diálogo político y de cooperación.
Finalmente, les expreso que nuestra historia parlamentaria está entrelazada en siglos de intercambios entre parlamentarios españoles y mexicanos.
Quisiera concluir como empecé en el discurso inaugural, diciéndoles que estamos a 210 años de ese primer encuentro, no lo olvidemos, que parlamentarios nacidos en el territorio mexicano acudieron aquí a España, fueron constituyentes y de manera única en la historia parlamentaria también fueron constituyentes en nuestra República. Es algo que pudiera resultar paradójico, constituir dos naciones con sistemas políticos diversos: una monarquía constitucional, como lo fue en el caso de la Constitución de Cádiz, y una República federal, como fue el caso de nuestra Constitución en 1824. El hito de esto es que constituyentes vinieron constituyeron en Cádiz, y constituyeron igualmente la República mexicana. Algo realmente para la historia.
Es enormemente satisfactorio expresar hoy, en esta XVI Reunión Interparlamentaria, que hemos damos testimonio de aquello que empezó con esos constituyentes, digámosles, binacionales, casi de doble nacionalidad, hoy parlamentarios del Reino de España y de la República mexicana seguiremos reafirmando las relaciones entre nuestras dos naciones a través de resolver problemáticas comunes, pero también reafirmar nuestros lazos históricos, culturales, económicos y políticos pero, sobre todo, nuestros lazos de una amistad imperecedera entre nuestros pueblos: España y México, México y España.
Muchas gracias.