Por Roxana Hebe Hernández
*El instrumento se emitió en 2012, tras la violación a los derechos humanos de la entonces Rectoría.* La UACM ha dado cumplimiento a cada uno de los puntos que la componían. *“Son ustedes un ejemplo de lo que implica el caminar hacia los derechos humanos: Nashieli Ramírez.
Coneme / La Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX) y la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) celebraron la conclusión de la Recomendación 14/2021, en un evento realizado en las instalaciones de la Comisión en Av. Universidad.
La entonces Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) emitió ese año, la Recomendación 14/2012 a la Rectoría y Contraloría General de la UACM, por la violación a derechos humanos de diversos integrantes de la comunidad universitaria. Entre los puntos recomendatorios destacan: la urgencia de crear una comisión de diálogo y conciliación ante el conflicto que se vivía al interior de la casa de estudios, así como la creación de una Defensoría de los Derechos Universitarios, de carácter independiente e imparcial dentro de la UACM, entre otras medidas.
El presídium estuvo compuesto por la Mtra. Dulce Noemí Hernández Julián, Defensora adjunta de los Derechos Universitarios en la UACM; la Mtra. Karla Paola Montalvo De la Fuente, Secretaria Técnica de la Comisión de Mediación del Consejo Universitario de la UACM; de Nashieli Ramírez Hernández, Presidenta de la CDHCDMX; el Mtro. Carlos Ernesto Martínez Rodríguez, Secretario Técnico del Consejo Universitario; y la Dra. Tania Rodríguez Mora, rectora de la UACM.
En su intervención, la Mtra. Karla Paola Montalvo De la Fuente, Secretaria Técnica de la Comisión de Mediación del Consejo Universitario de la UACM dijo, respecto al tiempo pasado desde la emisión de la Recomendación, que “diez años son muchos, pero lo son más si lo pensamos en términos de derechos humanos. Diez años de no tomar las medidas mínimas para garantizarlos trajo consigo dolor, rabia e impotencia para muchas personas de nuestra comunidad. A cada estudiante que se vio obligada a compartir salón con su agresor, a cambiarse de plantel o a suspender sus estudios, con tal de no coincidir con él, a cada trabajadora o trabajador que tuvo que soportar un ambiente de hostigamiento o de acoso, a cada profesor o profesora a quien se le dijo no se puede hacer nada, no hay normas, las y los tengo el día de hoy presentes, y en nombre de la UACM les pido perdón por los agravios y la desesperanza”.
Lo cierto es que –añadió– a fuerza de escuchar una y otra vez “no se puede hacer nada”, comenzó a extenderse, entre muchas universitarias y universitarios, la certeza de que era necesario y urgente contar con un marco normativo de convivencia. Ya no sólo porque la Ley de la UACM y el Estatuto General Orgánico nos obligaban, o porque así lo señalaba la Recomendación 14/2012, sino también —y sobre todo—, porque nuestra realidad cotidiana nos decía que así lo requeríamos.
“La UACM debe trabajar para convertir las medidas que ahora están en el papel en una realidad cotidiana; todas y todos tenemos algo que hacer en esa dirección. La etapa que inauguramos el día de hoy es nuestra oportunidad. Realizarlo nos permitirá cumplir aún mejor con nuestra principal tarea en tanto universitarias y universitarios: generar, construir y crear conocimiento en beneficio de la sociedad”.
Por su parte, la Mtra. Dulce Noemí Hernández Julián, Defensora adjunta de los Derechos Universitarios en la UACM, destacó que la Defensoría es fruto de un importante trabajo y aprendizaje. Recalcó la importancia de la construcción del Estatuto de Personal Académico y el Protocolo para Erradicar y Prevenir la Discriminación, la Violencia contra las Mujeres, el Acoso y el Hostigamiento Sexual. “Con estos instrumentos existen procedimientos para atender casos relacionados con funciones académicas, casos relacionados con violaciones de derechos humanos y universitarios, casos relacionados de faltas graves y casos de violencia. No obstante, debemos reconocer que atravesamos por una crisis de participación que implica un reto para nuestra comunidad universitaria, para ejercer su autonomía”.
Varios de estos procedimientos, dijo, no concluyen con la Defensoría o con otra instancia, sino que –siendo asuntos que competen a toda nuestra comunidad UACM– son resueltos por una instancia que requiere la participación de los tres sectores: el Consejo de Justicia. “Es preciso que esta comunidad universitaria participe y que ocupe los lugares de representación, no sólo en el Consejo de Justicia, sino también en el Consejo Universitario y que construya una comunidad fuerte, que construyamos una comunidad responsable”.
“Necesitamos participación. Sólo con ella podemos continuar creciendo, no sólo en el interior de la Universidad, sino también como sociedad y como factor de procesos de progreso. Hoy estamos felices de estar aquí –en la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México– conmemorando el cierre de la única recomendación dirigida a la UACM, refrendando nuestro compromiso para que no sea necesario que se emita ninguna más. Tenemos un compromiso con los derechos humanos, tenemos nuevas formas, nuevos procedimientos, nuevas instancias; nos toca –como Universidad– asumir este compromiso de participar y ejercer nuestra autonomía”.
La Dra. Tania Rodríguez Mora, rectora de la UACM, agradeció el apoyo y acompañamiento en “este proceso de saldar cuentas y dignificar nuestro rostro hacia fuera; una universidad pública con un proyecto humanista y crítico, que nunca debió ser objeto de una recomendación. Nos decimos a nosotros mismos que nunca más, que haremos lo que tengamos que hacer –como lo hemos hecho en estos años– para salvaguardar esto que estaba en nuestro proyecto universitario desde un inicio y que hoy –finalmente– logramos”.
“Sigamos con la tarea hecha, en plena disposición –señora presidenta, querida Nashieli– de sumar desde ese lugar. Ahora sí, con toda la fuerza que ya veníamos haciendo, en instancias de representación y defensa de los derechos humanos en esta ciudad. Sumar como un actor vivo, fuerte y dispuesto a compartir esas experiencias, a sumar nuestro saberes y nuestra fuerza institucional en esta garantía de derechos humanos, no solamente de los universitarios, sino de los habitantes de esta ciudad; así que cuente con nosotros y ojalá podamos hacer muchas actividades juntos”, enfatizó.
Reconoció y agradeció a las y los integrantes de la Comunidad Universitaria, especialmente a los integrantes del Consejo Universitario. “Gracias por poner su talento y disposición en el cumplimiento de todas esas promesas que, seguramente no serán perfectas y serán perfectibles”. Es parte de nuestro proyecto, abundó, formar, no solamente profesionales, sino ciudadanos, ciudadanas y personas respetuosas de los derechos humanos, comprometidas con la inclusión, conocedoras de las tensiones y tentaciones de las violencias y los autoritarismos; para que aprendamos a ser más empáticos, más responsables y a comportarnos de mejor manera como los universitarios y universitarias plenas que debemos ser.
“Lo que pudo haber sido y lo que ha sido tiene un solo fin: el presente –siempre este presente– que nos convoca a lo que tenemos que hacer hoy; este presente que nos enseña y nos tiene que hacer madurar y crecer, para volvernos más solidarios, más creativos en función de lo que hay que construir, de los pendientes que nos quede”, reiteró.
Finalmente, Nashieli Ramírez Hernández, Presidenta de la CDHCDMX, agradeció a las y los integrantes de la comunidad universitaria por su presencia y destacó que ésta es la primera vez que se realiza un acto de este tipo; “es un evento único para nosotros”.
Contextualizó el momento en que se generó la Recomendación, que fue a partir de hechos de violencia y de protesta, de violaciones a derechos humanos –entre ellos el derecho a la educación, el derecho a la dignidad, el derecho a la libertad de expresión–.
Apuntó que, no obstante la satisfacción de las recomendaciones inmediatas, “las que venimos a celebrar aquí son las que llamamos ‘las medidas de no repetición’. Se tardó mucho en todo lo que tiene que ver con lo estructural y que tenía que ver con los cambios. Aplaudimos muchísimo tener una contraparte (la Defensoría) ahí, donde podamos caminar.
“Nosotros también estamos contentos y contentas aquí en la Comisión y es que no tenemos muchas instituciones que retomen y hagan lo que ustedes –la comunidad universitaria– venir aquí hoy y orgullosamente decir: concluimos y cumplimos. Que les costó años, pero aquí están, que tienen ustedes para decir cumplimos y celebramos”, puntualizó.
“Esto es un ejemplo. Son ustedes un ejemplo de lo que implica el caminar hacia los derechos humanos, que es el camino de la transformación, el camino de la humanidad y el camino de ser más de tener un mundo más digno y de ser tratados con dignidad”, concluyó.