Por Salvador Ruiz / Corresponsal
Se trabaja de manera incluyente y participativa con los pueblos y comunidades indígenas, priorizando la protección al medio ambiente
Con la finalidad de priorizar la atención integral a los pueblos y comunidades indígenas y proteger las tierras, territorios y recurso naturales de Chiapas, el Gobierno de México continúa los trabajos de la Mesa Interinstitucional para la atención de la “Selva Lacandona”.
Estos esfuerzos son coordinados por la Secretaría de Gobernación (Segob), en colaboración con las secretarías del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), y sus órganos sectorizados.
Como fue dado a conocer en el comunicado del pasado 27 de abril, este esfuerzo interinstitucional propone generar un programa integral, incluyente, participativo y coordinado que dé respuesta con políticas y acciones a los distintos reclamos que históricamente han manifestado los pueblos y comunidades indígenas de la zona Lacandona, como la atención a los conflictos agrarios, la protección al medio ambiente y el fortalecimiento de la vida comunitaria.
Estas acciones permiten que el Gobierno de México realice trabajos como estudios de campo, visitas en territorio y estudios técnicos para abordar las situaciones particulares detectadas en esta región.
Sabiendo de la importancia que tiene la Reserva de la Biósfera de Montes Azules (Rebima) para los pueblos indígenas de la Selva Lacandona y para el país, el gobierno federal reafirma el compromiso de respetar y garantizar el ejercicio de los derechos colectivos de los pueblos y comunidades, además de resguardar y proteger sus tierras, territorios y recursos naturales.
El Gobierno de México reitera que cada una de las acciones y decisiones que se tomen en este proceso tendrán que ser resultado del diálogo y el consenso con las comunidades. Asimismo, se trabajará de manera incluyente y participativa, priorizando en todo momento la protección irrestricta al medio ambiente y el desarrollo sustentable, manteniendo el criterio innegociable de resguardar las Áreas Naturales Protegidas (ANP).
En este sentido, se continuarán las mesas de diálogo permanentes, invitando a sumar esfuerzos a las autoridades locales, para escuchar a la población que habita la zona, tanto a los representantes de las comunidades y subcomunidades, como a grupos o pobladores que se acerquen con alguna inquietud, bajo el principio de “No dejar a nadie atrás, no dejar a nadie fuera”.