Por Jaime Arizmendi
*Affaire Zedillo-AMLO/Sheinbaum/Noroña
*Martí Batres Indaga Desvíos en el ISSSTE
Coneme / Habla Don Fobaproa… Tras una larga ausencia de 24 años, desde que salió del país al dejar la Presidencia de México, Ernesto Zedillo regresó el domingo, y en busca de volver a estar en los medios se lanzó en contra de la Reforma del Poder Judicial que ya hasta se publicó en el Diario Oficial de la Federación y que, como dicen los jueces: ya es cosa juzgada.
Al participar en la apertura de la Conferencia Anual 2024 de la Asociación Internacional de Abogados (IBA, por sus siglas en inglés), el exmandatario sostuvo que dicha reforma “destruirá la democracia y llevará a México directamente a una dictadura”. Pero el mismo AMLO le salió al paso en la mañanera al señalar: Solo vino a hacer el ridículo
Respecto al tema, López Obrador enjuició tajante: “Vienen y traen a Zedillo, ¿no? A decir que ya hay una dictadura en México. Es de risa, sí, es de risa, hacen el ridículo, pero no pasa de ahí. Para añadir que fue durante el gobierno (1994-2000) cuando, muchas reformas que se hicieron, “sólo hicieron daño a nuestro país”.
Y prosiguió con preguntas que él mismo respondía: “¿Quién privatizó los trenes de pasajeros? Zedillo. ¿Quién se fue a trabajar con una empresa ferrocarrilera que se quedó con los trenes de México? Zedillo. ¿Quién tiene una pensión del Banco de México? Zedillo. Pero esos son los que representan a la política. Tiene todo su derecho de manifestarse, porque vivimos -ahora sí- en una auténtica democracia, no es dictadura ni ‘dictablanda’ ni tampoco es oligarquía como antes, el gobierno de una minoría con fachada de democracia”.
También la presidenta electa Claudia Sheinbaum fustigó a Zedillo a quien ella, dijo, “respeta”, pero no tiene autoridad moral para hablar de democracia, pues en su sexenio se originó el Fobaproa y quiso privatizar la industria eléctrica; “es un representante del viejo régimen de corrupción y privilegios y como tal opina. Y qué bueno que opine, para eso somos un país democrático”.
En rueda de prensa ofrecida en su Casa de Transición repuso: “Fíjense el argumento, dicen que vamos al autoritarismo y al fin de la República, y se van a elegir los jueces por voto popular; o sea, ¿cómo? Ahora resulta que la democracia, que es la elección en el Poder Judicial, representa autoritarismo. ¿No les parece una contradicción? Es una contradicción”.
Otro que se puso los guantes contra el huidizo político priista fue Gerardo Fernández Noroña, presidente de la mesa directiva en el Senado, para descalificarlo de tajo: “El 5 de diciembre de 1994 de un plumazo, en un mes, quitó a 26 ministros de la Corte sin foros de discusión, sin parlamentos abiertos. En un mes, en enero, la reforma ya estaba aprobada en las dos Cámaras. “Ese hombre viene a hablarnos de destrucción de la democracia”.
También cuestionó la “calidad moral y política” de Ernesto Zedillo al hablar sobre la aprobación de la reforma. Como argumento, recordó cuando el expresidente acordó con Felipe Calderón Hinojosa la creación del Fobaproa para volver pública la deuda privada de los bancos.
Fue –dijo cáustico–, el responsable de la matanza de Acteal; se benefició de la privatización de los ferrocarriles nacionales; no cumplió su promesa de revisar una propuesta de solución a la cartera vencida de los deudores de la banca y, por el contrario, “mandó al país a una crisis feroz que llevó a la cartera vencida a millones de mexicanos, pero a quienes salvó fue a los banqueros.
“Es ahora el héroe de la derecha. El vocero del Poder Judicial que ya se va. Así como dice y termino. No hay poder sobre la Tierra que detenga la reforma al Poder Judicial. No hay poder sobre la Tierra que detenga la instrumentación (…) así será aunque a Zedillo y a sus corifeos no les guste la democracia (…) En México manda el pueblo de México y nunca más personajes siniestros como usted”.
Vale recordar que la Reforma del Poder Judicial fue aprobada en el Senado en las primeras horas del miércoles pasado; al jueves siguiente ya había pasado en 19 Congresos locales. Así, el presidente López Obrador pudo emitir la Declaratoria de Constitucionalidad, y el 15 de septiembre fue publicada en el DOF.
Entre otros temas, contempla la elección por voto ciudadano de jueces, magistrados y ministros. De su lado, Claudia Sheinbaum previno que se respetarán los derechos laborales y prestaciones de trabajadores del Poder Judicial, pero, aclaró: «eso sí, se va a acabar el nepotismo y la corrupción». Y eso va para quienes creen que el erario es suyo, sea de origen federal, estatal o municipal…
Entre UMAs y Salario Mínimo… Hace casi un mes, el 21 de agosto, la presidenta electa reveló que Martí Batres, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, será en su gobierno titular del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE); la institución que “más deterioro tuvo en el periodo neoliberal”.
Anunció además que el político que la relevó en el Gobierno capitalino le ayudará a coordinar todas las tareas del Fondo de la Vivienda del ISSSTE (Fovissste), organismo que se ha convertido desde hace años en el dolor de cabeza de miles y miles de “beneficiados” con un crédito hipotecario.
Pese a que Sheinbaum Pardo admite que el Presidente López Obrador ha impulsado la nacionalización del ISSSTE cuyos servicios y nuevos hospitales estaban subrogados y en poder de empresarios privados. “Se ha avanzado mucho, pero se requiere mucho más trabajo para atender la salud y a todos los trabajadores del Estado”.
Repuso que a Martí lo conoce desde hace muchos años. “Los dos participamos en el movimiento estudiantil de CU. Yo era estudiante de la Facultad de Ciencias, estudiando Física y Martí era representante de prepa 7. Es un compañero de primera, tiene larga historia en la política y academia, porque ha escrito varios libros”.
“A los trabajadores del Estado les digo que vamos a estar a su servicio. Es muy importante seguir nacionalizando el ISSSTE; de hecho, se han venido nacionalizando varios servicios como anestesia, hemodinamia…Vamos a continuar con esa labor para que el Instituto tenga naturaleza del Estado”.
Lo que no lograron quienes ocuparon la Dirección General del ISSSTE en el gobierno de AMLO: José Antonio Ramírez Pineda, Pedro Zenteno Santaella y la actual Bertha Alcalde Luján; no se diga de los titulares del Fovissste, organismo que hasta antes del arribo de los neoliberales construía unidades habitacionales y sus créditos se pagaban en 10 o 12 años.
Actualmente, miles de derechohabientes que han pagado 12 o hasta 15 años padecen acoso y persecución de “abogados” quienes dicen representar al Fovissste. Nada les importa si el “beneficiario” se quedó sin empleo o enfrenta algún problema familiar o de salud; los “perros cobradores” amenazan con dejar en la calle a su víctima. Martí sí pondrá orden…