De la Redacción
*“Pedimos el voto ciudadano para hacer lo que por falta de tiempo no alcanzamos a realizar en mi gobierno”, expresó el exgobernador y senador que busca reelegirse para el Senado de la República
Coneme / TIJUANA, B.C.- Al encuentro de residentes del fraccionamiento Campestre-Murúa, en su campaña por la reelección para el Senado de la República, Jaime Bonilla Valdez manifestó que el Partido del Trabajo en Baja California tiene como objetivo el de hacer un gobierno de compromisos, no de promesas incumplidas.
Su convicción la reafirma al escuchar las reiteradas quejas ciudadanas por los recurrentes problemas de aguas negras que escurren sobre calles sin pavimentar o en mal estado, abandono de parques y áreas verdes, falta de alumbrado público y deficiente servicio de recolección de basura, agravada la situación por el evidente abandono gubernamental.
“Cómo quisiera que la gobernadora Marina del Pilar viniera a estas colonias con el corazón por delante que tanto pregona, para que escuche y atienda las necesidades de la comunidad que tiene totalmente olvidada y que, con justa razón, nos confía su desencanto con los gobiernos morenistas”, comentó durante su recorrido por el icónico sobre ruedas instalado en la intersección de la calle Choix y avenida Murúa Martínez.
Acompañado del candidato del PT a diputado federal José Antonio Lizárraga Castro para el Distrito 05, y del Dr. Alonso Oscar Pérez Rico, coordinador de Afiliación del mismo partido en esta jurisdicción, inició su caminar desde las 11:30 de la mañana y concluyó casi dos horas después, tiempo en el que saludaron de mano y palabra a cientos de tijuanenses residentes de este populoso sector de Tijuana.
“Con apoyo del voto ciudadano que confiamos tener de modo mayoritario en las urnas el domingo 2 de junio próximo, seguramente daremos las respuestas que la población está esperando de sus autoridades, porque a la fecha nos siguen diciendo los ciudadanos, que están muy decepcionados del nulo interés que muestran, tanto la gobernadora como la alcaldesa, y sus peticiones se quedan truncas porque ni siquiera les dan una respuesta”, comentó el senador Bonilla Valdez al hacer una rápida evaluación de la jornada sabatina.
Uno de los temas recurrentes que les fueron planteados en este recorrido en el Murúa Campestre es de los escurrimientos de aguas negras, hediondas e insalubres, que “corren” sobre el escaso pavimento o la superficie de terracería de las vialidades, convertidas en verdaderos “viacrucis” para automovilistas y transportistas que por aquí transitan.
Una señora joven, se acercó a la comitiva encabezada por el senador Bonilla Valdez, para comentarle que no están contra la instalación de los mercados sobre ruedas en las calles de su colonia, pero sí de que el gobierno municipal no manda limpiar el área que utilizan y donde dejan desperdicios, basura, etc.
Sobre el tema de las “aguas negras”, que evidencian una fallida red de drenaje, las quejas fueron muchas y con expresiva molestia de los residentes, por lo que el exgobernador comentó: “… por eso me gustaría que la gobernadora viniera un día a las colonias, con el corazón por delante que dice tener, para que escuche las denuncias de la gente… al pueblo no le importa el vestido nuevo que se pone o si le gustan los tacos o la comida china. Es obvio que no viene, porque teme los reclamos, y es que solamente asiste a eventos donde su equipo le asegura tener todo bajo control”.
A quienes, al verlo y saludarlo, preguntan al senador Bonilla Valdez ¿a qué se compromete el Partido del Trabajo (ahora que ya no está con Morena en Baja California), la respuesta inmediata y espontánea es la de “venimos a hacer compromisos, no promesas… así lo hice cuando fui gobernador del estado y cumplí mis 100 compromisos… durante mi gobierno dimos desayunos escolares, como un derecho constitucional; entregué permisos de taxis a verdaderos choferes, instalé redes de agua y drenaje en colonias que tenían 20 años de haber hecho sus solicitudes y pagado medidores; pagamos la deuda de más de 1,800 millones de pesos a la UABC y le entregamos el Centro de Gobierno del Estado en Tijuana, donde hoy tienen cupo cerca de 2 mil estudiantes de ciencias de la medicina”,
Recordó que también promovió la regularización de la tenencia de la tierra en la entidad y entregó viviendas a centenares de damnificados por deslaves en colonias de Tijuana; llevó a cabo la limpieza total del canal del Rio Tijuana y del Arroyo Alamar, aunque no era responsabilidad del gobierno estatal si no de CONAGUA, pero resolvió de esa forma un conflicto binacional porque los arrastres en ambos cauces invadidos por maleza, tierra y basura, estaban contaminando las playas de Imperial Beach, California, y ya estaba en proceso una demanda contra el gobierno mexicano.
Pero lo más sobresaliente es que el gobierno que encabezó de 2019 a 2021, enfrentó con firmeza la pandemia por Covid 19, al gestionar y obtener el respaldo del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, para que enviara 1 millón de vacunas, aplicadas mediante una eficiente estrategia desarrollada por el entonces secretario de Salud, Dr. Alonso O. Pérez Rico, y el valioso y valeroso apoyo del sector salud de Baja California, en tiempos en los que la falta de médicos fue un obstáculo mayor que hubo que resolver.