Por Leslie González
Coneme / A un año de su inicio de operaciones, el Semillero Creativo de Creación literaria en lengua náhuatl en San Pablo del Monte, Tlaxcala, empieza a cosechar los frutos de su trabajo, contribuyendo al objetivo de potenciar la protección de los derechos humanos y la libertad de los pueblos indígenas, así como la protección de las lenguas originarias.
Así lo comenta en entrevista su docente Fabiola Carrillo Tieco, quien, junto con ocho niñas y niños, y 12 jóvenes de San Pablo del Monte, conforman uno de los Semilleros Creativos de Tlaxcala.
Cabe recordar que los Semilleros Creativos son grupos de formación artística con enfoque comunitario para niñas, niños y jóvenes a través de las artes, en todo el país, impulsados por el programa Cultura Comunitaria de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Actualmente existen más de 300 semilleros en todo el país dedicados a diversas disciplinas artísticas de interés en cada comunidad, en Tlaxcala operan 12.
El gusto y la pasión, no se pueden enseñar como alguna efeméride, comenta la docente, quien se especializa en la enseñanza en lengua náhuatl en comunidades. «Hay que trabajarlos, contagiarlos sobre todo a los pequeños que no están familiarizados con la expresión cultural y que nunca han podido reconocer que ellos mismos pueden levantar la voz y expresarse a través del arte», comparte.
Fabiola Carrillo Tieco, quien actualmente realiza su tesis de doctorado en Estudios Mesoamericanos, con especialidad en estudios de Cultura Náhuatl en la Universidad Nacional Autónoma de México, destaca que uno de los desafíos en esta comunidad es que las niñas y niños ya no hablan la lengua materna, sus abuelos no se la enseñaron a sus papás y, a su vez, ellos tampoco la instruyeron en sus casas, por temor a la discriminación y a que no tuvieran oportunidad en el campo laboral.
Por ello, Fabiola ha tenido que probar diversas técnicas: “Combino la parte de la literatura, las características del cuento, los poemas, el relato y voy conjugando a su vez el fomento a la lectura y escritura enseñándolo en lengua náhuatl”.
Esto, permite hacer más natural el aprendizaje, comenta, “les hablo todo el tiempo en náhuatl y van aprendiendo vocabulario y ciertas oraciones a través de dibujo, trabalenguas, adivinanzas, memoramas, frases que se van ejemplificando con actividades familiares, juegos numéricos y algunos cantos. Con ellos no es mucho el empleo de gramática”, explica.
Otro de los desafíos, dice, es que hay niñas y niños que usan bien el español y, por ello, les cuesta trabajo la pronunciación en náhuatl. Al mismo tiempo, hay quien habla bien el náhuatl, pero no puede escribir el español, “ese es mi gran reto como docente, enseñarles a la par las dos lenguas e irlos emparejando poco a poco”. En cambio, con las y los jóvenes, en su mayoría mujeres, hay otra dinámica, “tienen la conciencia de aprender, de conocer parte de su identidad y sus raíces; tienen inquietudes y preguntas, incluso dan propuestas de actividades”.
Por su parte niñas y niños, así como jóvenes que integran este Semillero Creativo de Creación literaria en lengua náhuatl coincidieron en entrevista que este tipo de actividades han sido muy benéficas para sus vidas, ya que han podido crear cuentos, leerlos y aprender la lengua que hablan sus abuelos, lo que les enorgullece y llena de alegría.
Tal es el caso de Emanuel de 12 años, quien disfruta de jugar memorama y leer cuentos; ha participado en distintos eventos, tanto en la capital de su estado, Tlaxcala, como en el Magno evento de Cultura Comunitaria Tengo un sueño (TUS).
A su vez, Paulina, de 9 años, expresó que se siente muy contenta por aprender náhuatl, le ha permitido conocer gente, escribir cuentos, leerlos y participar en TUS, donde hizo muchos amigos.
En el caso de Humberto, de 15 años, dice que pertenecer al semillero le ha cambiado la vida, ya que aprender la lengua de sus abuelos le enorgullece mucho; con ese aprendizaje ha podido traducir cuentos y escribirlos, además de que le abrió las puertas para participar en TUS.
Como parte de las actividades que se realizan en el marco del Día Internacional de las Mujeres 2023, el pasado 7 de marzo, las y los integrantes del Semillero Creativo realizaron lecturas de cartas y frases en náhuatl a mujeres ausentes, presentes y a mujeres que admiran.
En cuanto a la Huella comunitaria, una actividad destacada que deja constancia del trabajo realizado en su comunidad, el 17 de marzo realizaron un mural con frases en náhuatl alusivo al tema “Identidad y territorio”.
“Es algo sencillo, pero significativo. Aquí la idea es que la semilla quede. Que a partir de ahora tengan la curiosidad de conocer y de expresarse, que el arte y la cultura, al final, se vuelvan hábitos”, concluye Fabiola Carrillo Tieco.