Por Leslie González
*Ocho proyectos compartirán su trabajo a través de talleres, laboratorios, piezas teatrales y seminarios abiertos al público *Por tercer año consecutivo el Helénico promoverá y difundirá los procesos creativos de diversos grupos teatrales
Coneme / La posibilidad de combatir si miramos y escuchamos distinto
El Centro Cultural Helénico, institución de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, presenta su programa de Residencias Artísticas 2023, a través del cual se desarrollarán y compartirán los procesos creativos de ocho grupos especializados en artes escénicas.
Se trata de una apuesta para generar comunidad y reafirmar que en el andar artístico siempre es más importante el proceso que el resultado. Asimismo, se desarrollarán ocho proyectos escénicos en torno a las desapariciones forzadas, artistas trans, actuación, metateatralidad, violencia, justicia, perspectiva de género en las obras clásicas, diversidad de género, no violencia en las infancias y desarrollo de públicos con jóvenes audiencias.
De esta forma —mediante ensayos abiertos, puestas en escena, seminarios, laboratorios y clases magistrales—, cada una de las personas y grupos participantes se posicionarán desde el trabajo colectivo para construir espacios que promuevan las artes escénicas y los procesos de investigación sobre ellas en México.
A continuación, se presenta un breve recorrido por los proyectos de residencia que se llevarán a cabo durante el año 2023:
Futuros posibles, de la Red latinoamericana para el desarrollo de públicos (REDLAP): Javier Ibacache, Sonia Jaroslavsky, Melissa Giorgio, Zavel Castro y Aída Barrera experimentarán formatos de indagación cualitativa y de campo para recopilar y analizar información sobre las jóvenes audiencias de teatro. Además, mediante un laboratorio, buscarán orientaciones que faciliten el desarrollo de públicos a nivel local —en Ciudad de México—, y en otros países de América Latina.
Cuerpo, género, disidencias y biodiversidad, del Laboratorio de Artistas Sostenibles (L.A.S.): en esta residencia de Laura Uribe y Sabina Aldana se abrirá un espacio de diálogo y encuentro para hacer un llamado a la empatía, a travestir la especie humana y no humana, a deshacerse de la domesticación de los cuerpos, a cuestionar los privilegios y desafiar lo establecido por la violencia del capitalismo, el antropocentrismo, el adultocentrismo y la hetero-cis-sexualidad. Al mismo tiempo, se indagará en los territorios de las infancias y las juventudes gobernadas por la hegemonía heterosexual del (cis)tema patriarcal, para proponer otras formas de existir.
Ya no hay bosque de niebla, de Teatro Línea de Sombra (TLS): Jorge A Vargas, Philippe Amand, Luis Mario Moncada y Alicia Laguna llevarán a cabo un montaje escénico basado en el texto Tío Vania, de Antón Chéjov, con la intención de poner en relieve una serie de correspondencias y tensiones entre las visiones chejovianas de amor romántico, desencuentro de clases y de la lucha por la preservación de los recursos naturales —propias de aquella sociedad feudal del siglo XIX— y la realidad actual, con sus implicaciones sociopolíticas. Todo esto atravesado por la reflexión metateatral presentada en ejemplos como la película Vania en la Calle 42.
Los negros pájaros del adiós, de Iguana Teatro: es una obra escrita por Óscar Liera, mediante la cual Alejandro Ainslie, Roxana Andrade, Daniel Bretón, Daniel Primo y Emilio Zurita experimentarán desde la actoralidad para conseguir la construcción de la imagen y las atmósferas llenas de viento, mar y telas que se mueven y transforman al escenario en un juego poderoso, teatral y bello. La intención es crear una poética audiovisual de abstracciones figurativas y simbólicas, que permitirán al público transitar de la clara superficie de los espacios más visibles, a las profundidades menos luminosas de los intersticios entre la conciencia y la ensoñación. De esta forma se cuestionará por qué la justicia en este país es una ilusión que hace presente la necesidad de tomar en las manos propias el destino personal y el ajeno.
The game of Cardenio (El juego de Cardenio), de Efe Tres Teatro: Bronwyn Steinbherg, Fernando Villa, Lauren Morris, Luise Jaramillo y Amelia Griffin darán paso a una colaboración internacional —con integrantes de Canadá y Estados Unidos— que cuestionará cómo se pueden montar obras clásicas con la consciencia actual de la violencia de género que puede existir en ellas. Transformando la puesta en escena en un juego de mesa gigante, se presentará Cardenio, una obra supuestamente perdida de William Shakespeare, la cual pudo inspirarse en episodios de Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra.
LEIB, de Cuatro X Cuatro: es una investigación de Shantí Vera que pone al cuerpo como primer territorio de pensamiento y encuentro sensible con lo otro. Se despliega sobre un mapa que habita cuatro preguntas: ¿Qué puede hacer un cuerpo?, ¿qué desea un cuerpo?, ¿qué resiste y qué olvida un cuerpo? Estos cuestionamientos están atravesados en lo abstracto por Spinoza y Nietzsche y, en lo concreto, se relacionan con el conocimiento —empírico, místico, metafísico y científico— que cultivan integrantes de colectivos de buscadores de personas desaparecidas en México.
La orfandad en las infancias a causa de la ausencia, de Astillero Teatro: María Teresa Adalid y Oswaldo Valdovinos proponen una serie de laboratorios y talleres con la finalidad de explorar la orfandad en las infancias; no solo se refiere a la muerte de uno o de ambos progenitores, sino a la ausencia de una guía educativa, cultural y emocional en esta etapa de la vida, lo cual trae repercusiones en la formación y desarrollo de las y los infantes. Para ello se plantea un universo que contempla como causa de orfandad al COVID-19, el narcotráfico, la niñez migrante que viaja o se queda sola y la situación de calle o el olvido de padres vivos.
Infancias diversas, futuros sin violencia, del Colectivo Aletheia: Fernanda Del Valle Fernández, Ivonne Gutiérrez Vieyra, Lilia Andrea Luna Labra y Karina Yáñez Espinoza posibilitarán que las y los participantes de esta serie de talleres desarrollen expresiones escénicas a partir de los aprendizajes y experiencias compartidos; de esta manera se construirán diferentes formas de pensamiento respecto a la diversidad sexual y de género, así como del conocimiento y respeto de todos los cuerpos. A partir de esta residencia se busca asentar el diálogo entre diversos sectores, poblaciones y actores sociales que permita desarrollar nuevas propuestas y metodologías para abordar, visibilizar y combatir la violencia de género.
En palabras de Alejandro Ainslie: “El arte no debe ser explicado, pero sí debe compartirse el proceso por el cual se crea. Cuando alguien me explica su pieza, no me siento bien; pero si me muestra su proceso, lo comprendo. Compartir el proceso es una alternativa para hacer parte al público y abrir nuevos senderos”.
Para conocer el resultado de este tipo de experiencias, se pueden consultar las residencias anteriores, tales como: el libro Palabras Insurrectas: Derribar los muros con tinta negra, del Colectivo Arte Sin Frontera; la versópera rock Pandemónium, la tregua del caos, de Michelle Solano; el monólogo La última cinta de Krap, interpretado por Luis de Tavira; al igual que la exitosa puesta en escena Junio en el ’93, de Teatro de Arena, por mencionar algunos. Estos proyectos favorecen el diálogo, aprendizaje y visibilización de las prácticas escénicas en sus diferentes contextos.
Las Residencias Artísticas del Centro Cultural Helénico se posicionan desde un lugar que entiende al propio camino como la obra en sí: de esta manera se da una apertura para colectivizar afectos, compartir estrategias creativas, expandir saberes y seguir construyendo una escena más diversa, solidaria y crítica.
Para más información: helenico.gob.mx.