Por Elizabeth Vaca

*Andrea Betzabeth Medina Tapia hizo uso de la palabra en la sesión de hoy

Coneme / Andrea Betzabeth Medina Tapia, hablante de la lengua Otomí, dijo estar orgullosa de su cultura y raíces, y manifestó el interés de seguir aprendiendo de sus tradiciones.

El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda, expresó que Medina Tapia es originaria del municipio de Villa del Carbón, en el Estado de México; es una estudiante con buenas calificaciones y ha participado en la expo-cultura “Herencia Otomí” de este año.

En su intervención en la sesión semipresencial de la Cámara de Diputados, con la finalidad de impulsar el uso y conservación de las lenguas indígenas nacionales, Andrea Betzabeth indicó que “a veces a los niños de mi edad les da pena hablar otro idioma que no sea el español, porque a nuestros papás y abuelos también les da vergüenza”.

Mencionó que cuando pregunta por qué no todos sabemos las mismas canciones y cuentos en Otomí, “me dicen que ya los abuelos no nos las quieren enseñar porque el hablarlo nos hace más indios. A mí no me da vergüenza que me digan india. Si mis papás y familia no pertenecieran a esta región, quizás yo no podría aprender lo que ahora sé y no sería lo que ahora soy”.

Villa del Carbón, relató, tiene 72 comunidades y de ellas 13 son pueblos originarios, y en la escuela le enseñaron que no solo en su municipio hay comunidades indígenas, sino que pertenecen a la ruta Otomí del Estado de México.

“Somos muchos, pero no estamos unidos. Las diferencias de nuestro entorno nos separan y el miedo nos oculta. Me gustaría que algún día nos veamos como un solo grupo. Todos somos parte del mismo origen y debemos sentirnos orgullosos. Han pasado muchos años desde que ocultamos gran parte de nuestras tradiciones, pero aún estamos a tiempo de recuperarlas”, afirmó.

Medina Tapia expuso que los niños, niñas y jóvenes todavía quieren y pueden aprender de su pasado; “solo nos hace falta un poco de ayuda en nuestras escuelas y comunidades, en la casa, con los papás, los abuelos y adultos que están cerca de nosotros, que nos enseñen a querer y valorar lo que somos, para que retomemos lo que nos hace especiales”.