Por Dany García 

Coneme / Tan solo el día de su apertura, la exposición “Aztecas: el pueblo que movió el sol”, inaugurada este lunes 2 de mayo de 2022, en el Museo Nacional de Corea, agotó las entradas previstas para este mes, así lo dio a conocer el embajador de México en la República de Corea, Bruno Figueroa Fischer, a través de su cuenta de Twitter.

Para la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, esta expectativa es muestra del creciente interés y aprecio que las culturas originarias de México generan más allá de nuestras fronteras.

“Parte fundamental de nuestras políticas ha sido mostrar al mundo lo mejor de las culturas y tradiciones mexicanas. Y en este sentido, la exposición de ‘Aztecas: el pueblo que movió el sol’ se ha vuelto una gran embajadora de México en otras latitudes; no hay que olvidar que estuvo en Alemania, Austria, Países Bajos y ahora llega al recinto cultural y artístico más importante de Corea, para terminar su recorrido.

“De manera adicional, quiero reconocer que este es un esfuerzo conjunto en el que participan muchas instituciones. Por supuesto, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Embajada de México en Corea, y de distintos especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)”, destacó.

Esta exposición de primer orden, puntualizó Frausto Guerrero, es la joya de las conmemoraciones por del 60 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre México y Corea, hecho que reviste un significado muy especial para la sociedad coreana, dado que se considera que se cierra un ciclo de vida y el inicio de uno nuevo.

Sin duda, agregó, este tipo de exhibiciones, además ponen en valor la importancia de las piezas patrimoniales como símbolo de identidad de los pueblos, como elementos valiosos para el estudio de las civilizaciones ancestrales. Es por ello que, desde el Gobierno de México, seguiremos pugnando por el respeto a estos objetos patrimoniales, los cuales “no son piezas decorativas, representan un legado invaluable de las culturas que forman parte de nuestra historia y son muestra de la diversidad y riqueza cultural de México”.

“Aztecas: el pueblo que movió el sol” es organizada por la Secretaría de Cultura federal, a través del INAH, en colaboración con el Museo Linden de Stuttgart, Alemania, y en cooperación con el Museo Etnográfico de Viena, Austria; con la curaduría de Doris Kurella, del Museo de Linden, y la asesoría científica de los arqueólogos mexicanos Leonardo López Luján, Raúl Barrera Rodríguez y Eduardo Matos Moctezuma.

El montaje presenta 123 objetos arqueológicos y dos reproducciones, pertenecientes a las colecciones del Museo Nacional de Antropología, el Museo del Templo Mayor y el Proyecto Templo Mayor.

La exhibición ofrece un acercamiento a la historia, la vida cotidiana, la ritualidad, los logros culturales y el legado del pueblo venido de la mítica ciudad de Aztlan, contribuyendo también a esclarecer muchos estereotipos que existen en torno a prácticas como el sacrificio humano en las sociedades mesoamericanas.

La mayoría de las piezas que conforman “Aztecas: el pueblo que movió el sol” proceden de las excavaciones arqueológicas realizadas por el Proyecto Templo Mayor y el Programa de Arqueología Urbana; de manera que se trata de los más recientes hallazgos registrados por el INAH en los vestigios de la capital tenochca.

Entre las piezas destacan máscaras-cráneo, esculturas en barro de gran formato como la que representa al dios de la muerte, Mictlantecuhtli; finas láminas de oro que simbolizan a la divinidad lunar Coyolxauhqui; caracoles cortados y esgrafiados, cuchillos bifaciales de gran tamaño, copas policromadas, una escultura de atado de años y un cofre de piedra para ofrenda (tepetlacalli), entre otros inestimables objetos.