Por María Esther Beltrán Martínez
Coneme / Málaga, España. – Uno de los artistas plásticos españoles que trabaja con tenacidad es el malagueño José Luis Puche. La pandemia no ha sido obstáculo para crear y realizar obras que se han visto ya en diversas salas de Andalucía. Ha presentado su tercera exposición en Sydney y participa activamente en las actividades de las Cofradías de Málaga.
En entrevista habla de su trabajo. Y nos relata que en tiempo de la pandemia por el Covid-19 fue un tiempo difícil. Se vio obligado por el confinamiento a trabajar en casa y con la idea de hacer bocetos trabajó y se convirtieron en obras que han adquirido coleccionistas de diversas partes del mundo. “Me vi en medio de una melancolía por todo lo que estaba a mi alrededor, noticias malas, muertes de amigos y conocidos. Sin el arte hubiera tenido una depresión. Los dibujos fueron un motor para sacar todo lo que se estaba viviendo”.
Una de las exposiciones que vieron la luz con estas obras fue: José Luis Puche. Colibrí puntos de ruptura. Se presentó en la Universidad de Jaén.
En el mes de septiembre del 2021 se celebró una exposición de trece imágenes titulares de la Semana Santa de Málaga, titulada El Verbo Encarnado. Puche participó con la obra intervenida sobre la plataforma del habitual monte de claves de Jesús Cautivo, titular que se venera especialmente por los malagueños y es figura imprescindible en Semana Santa. Su obra fue una de las más fotografiadas en las redes sociales por su excelente trabajo.
“No he querido olvidarme de la imagen que los fieles tienen bajo los pies del Señor, por lo que realice un dibujo sobre papel, grafito y lápiz de color en el que la vegetación de claveles rojos se interpreta de un modo expresionista con incursiones iconográficas en los cuatro costados del Trono. Atravesando los costados de izquierda a derecha un Elefante, y del frente a la trasera un Pavo Real, ambos enlazados en forma de cruz en el trono aludiendo al sentido de la eternidad de Cristo. Por otro parte las plumas del Pavo Real en la trasera del Trono siguen la línea argumental visual de la caída de la túnica de la imagen, en clara intención de continuidad entre imagen y trono. Al mismo tiempo los ojos de las plumas, como bien sabemos, son los ojos de Dios que todo lo ve, devolviendo la mirada a las decenas de miles de promesas que van tras el trono los Lunes Santos, homenajeando a todos estos fieles y haciendo de este trabajo no una obra efímera, sino atemporal.
Por último, una procesión de peces transita por el Trono con un doble sentido, por un lado la idea de la multiplicación de la fe y por otro la contextualización marinera de la ciudad y su imagen, dando a la obra mayor sensación de fluidez desde el punto de vista formal”.
A Puche también le han hecho el encargo de realizar el cartel de la salida procesional de Nuestro Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Trinidad de la Semana Santa del 2022, obra que resalta las imágenes .El dibujo comienza como un ejercicio plenamente figurativo asentado sobre las sólidas bases del arte clásico para posteriormente sufrir una profunda transformación donde el dibujo adquiere un cambio puramente orgánico, logrando una imagen nueva y actual donde el dibujo coge el total control de su definitivamente y el artista queda en otro plano. Así sucede capa tras capa, donde lo que queda es un testimonio de todo lo ocurrido, el dibujo hecho acontecimiento.
Puche ha presentado su tercera exposición en Sydney con 16 piezas, la curadora fue Kate Smith y tuvo como título El legado del agua, obras realizadas durante gran parte de 2021, con su técnica habitual carbón graso, pastel graso y lápiz de color sobre papel Saunders Waterford.
“En esta exposición no hay un hilo conductor, ni narrativo ni conceptual, aquí el placer es la ley. Inmersos en un periodo de pandemia que aún no ha sido superado, el primer revés emocional que ha vivido y sufrido mi generación me ha hecho reflexionar sobre la importancia o no de aquello que nos rodea en la vida, sobre lo importante y lo superfluo, sobre la existencia misma de la vida. El agua en mi obra es el motor transformador de todo mi trabajo, de mi dibujo, aquel que ha sido trabajado a base de golpes y toques sobre el papel, incluso en ocasiones hasta con violencia, pues nada nuevo existe sin una agresión matérica y visual a lo que hubo con anterioridad”.explica el artista español que tiene para este años planes de viajar al extreanjero.