Por Sujeili Padilla
–Se sumó a la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias, organismo que busca la equidad en la distribución mundial de vacunas
-El taller “Respira México” apoya en su rehabilitación a personas que padecieron la COVID-19
Coneme / La COVID-19 impuso pautas en las actividades de la Universidad Nacional. La comunidad se enfocó en el análisis, desarrollo de investigaciones y propuestas tecnológicas para enfrentar la pandemia. La Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus se mantuvo como un apoyo y voz crítica dentro y fuera de la institución en beneficio de la sociedad.
La UNAM puso a disposición de los gobiernos federal y de la Ciudad de México 20 ultracongeladores para coadyuvar a la cadena de frío, indispensables para apoyar el proceso de vacunación. Tienen una capacidad, en conjunto, cercana a 10 mil 500 litros para almacenar de tres a cuatro millones de dosis de la vacuna Pfizer.
La Universidad Nacional recibió apoyos de la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación, del Gobierno de la Ciudad de México, a fin de fortalecer la infraestructura para la investigación en enfermedades infecciosas y la evaluación preclínica de dos biológicos.
Este año, la UNAM, con apoyo de la Secretaría de Relaciones Exteriores, se sumó a la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias (CEPI), miembro del grupo COVAX, organismo que busca la equidad en la distribución mundial de vacunas. Sus expertos ayudan a medir la respuesta inmune inducida por candidatos vacunables contra la COVID-19.
Laura Alicia Palomares Aguilera, directora del Instituto de Biotecnología se constituyó en la primera latinoamericana en ingresar al Comité Asesor Científico de CEPI, donde contribuirá a la toma de decisiones ante problemas como la pandemia.
Estudiantes y académicos universitarios del ámbito de la salud robustecieron su trabajo en el combate, análisis e investigación sobre el SARS-CoV-2, mediante 16 trabajos recepcionales o tesis con los que aportaron soluciones y obtuvieron sus grados académicos y especialidades.
En la Universidad de Harvard probaron una estrategia implementada por especialistas de la UNAM en Medicina, Biología y Matemáticas, diseñada y utilizada con éxito para atender a pacientes con la COVID-19, al combinar dos medicamentos.
Con especialistas de Alemania y Cuba, la UNAM se sumó al Centro Alemán-Latinoamericano de Investigación y Formación en Infección y Epidemiología, para formar estudiantes de doctorado en investigación y prevención de enfermedades infecciosas y futuras pandemias, con un enfoque multidisciplinario e integral.
Expertos del Instituto de Física crearon un termómetro infrarrojo que indica de forma sencilla, mediante emojis o íconos gráficos, la temperatura de las personas, a fin de identificar posibles casos de coronavirus. El equipo utiliza sensores térmicos que no emiten radiación y solo capturan la del cuerpo humano.
La UNAM, Cruz Roja Mexicana y Accenture México unieron esfuerzos para implementar un proyecto de prevención de la COVID-19 en esta casa de estudios. Se pusieron a disposición de la comunidad más de tres mil pruebas PCR para detectar la enfermedad, sin costo para los universitarios, para lo cual se inauguró un hospital de campo de la Cruz Roja en el Estadio Olímpico Universitario.
Expertos e investigadores de la UNAM presentaron la plataforma EpI-PUMA, desarrollada en el Laboratorio para la Simulación de Sistemas Complejos Adaptativos, de esta casa de estudios, que permite elaborar modelos de predicción de riesgos epidemiológicos del SARS-CoV-2 para ayudar en la toma de determinaciones.
“Respira México” fue una de las estrategias más exitosas creadas por la UNAM para ayudar a aquellas personas que padecieron la COVID-19 y presentan secuelas en su capacidad pulmonar. Creada por Teatro UNAM y el Centro de Estudios para el Uso de la Voz. Se trata de una herramienta novedosa para asistirlos y brindarles consejos para auxiliarles a recuperar su respiración profunda; se encuentra disponible en el sitio web de Teatro UNAM y en su canal de YouTube.
El concurso infantil “Lo que veo en la pandemia”, organizado por la Coordinación de Humanidades, reconoció las emociones que han desarrollado niñas y niños en relación con su experiencia durante la pandemia. El certamen recibió 265 trabajos de 83 municipios, de 22 estados del país, en dos disciplinas: dibujo y expresión escrita.
Fue presentada la colección “Cartas desde una pandemia”, con textos creados a partir del confinamiento obligado en 2020, que profundizan en los efectos de la COVID-19 en la vida humana, a partir de dos series: Correo Certificado y Entrega Inmediata. La colección reúne textos de corte tradicional y de carácter epistolar.
Científicos del Instituto de Física revelaron que elaborar cubrebocas caseros con tres capas de poliéster, como el usado en las camisetas de futbol, son tan eficaces para proteger de la COVID-19 como un KN95. Mediante técnicas de microscopía electrónica de barrido, los expertos probaron su alta eficiencia, funcionalidad, economía y bioseguridad.
Fue develado el mural “ENEO, vocación por la vida”, de Alfredo Nieto Martínez, en reconocimiento a la enfermería del país, a su labor durante la pandemia y al orgullo por la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia.