Por Tania Arizmendi
-Familia de artesanos lleva más de 60 años elaborando calaveritas de azúcar.
Coneme / En esta temporada de Día de Muertos y en homenaje al personal de salud que desde inicios de la pandemia por COVID-19 están en la primera línea de combate, el artesano Abel Librado Ruiz, diseñó esqueletos con bata blanca emulando a médicos y enfermeras, los cuales oferta en la romería instalada en el Centro Histórico de Xochimilco.
Para fortalecer las tradiciones, año con año, él junto a su familia crean y comercializan calaveritas de azúcar y cráneos de diferentes tamaños, así como diversos diseños en forma de ofrendas, platillos típicos y tumbas, entre otros creativos elementos propios de la temporada de Día de Muertos. Originario del barrio de La Asunción, explica que su familia se dedica a la elaboración de artesanías con azúcar desde hace más de 60 años, siguiendo una técnica artesanal aprendida de sus ancestros. “Esta noble tarea, la aprendí de mis abuelitos. Mis padres elaboraban el betún, mientras mis hermanos y yo decorábamos las figuras”, recuerda Abel con nostalgia.
Recalca que en este año quisieron rendir un homenaje a los héroes anónimos, por lo que idearon figuras que retrataran al personal de salud. Durante la pandemia sobrevivió, económicamente, junto con su familia con pedidos a domicilio. A la oferta de productos, agregaron dulces cristalizados elaborados con calabaza, camote, higo y tejocote. “Nuestros clientes saben de nuestra calidad y durante la pandemia nos hacían encargos, los cuales llevábamos hasta sus casas con las debidas medidas sanitarias. De igual forma, por mensajería especial realizamos envíos a diversos estados de la República”, enfatiza el entrevistado. Don Abel dice sentirse orgulloso de preservar este oficio que llena de color los altares tradicionales de Día de Muertos y que pese a las condiciones, es un oficio que se mantiene vivo.