Por Tania Arizmendi
-La importancia de revalorar el contexto en el que se desarrolló la historia y memoria de la resistencia indígena
-Los especialistas consideran necesario replantear la forma en que se narra este episodio de la historia de México desde las aulas, museos y el arte
Coneme / Bajo la moderación del poeta Mardonio Carballo, durante este debate Lila Downs Sánchez, antropóloga social y cantante; Flavio González Mello, dramaturgo y director de cine, teatro y televisión; y Carlos Brokmann Haro, arqueólogo, historiador y doctor en antropología, se llevó a cabo el cuarto “Jueves de Debate”, como parte del programa de los 500 años de la Resistencia Indígena de México-Tenochtitlan, organizado por el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Cultura de Ciudad de México.
Durante esta producción que se transmite todos los jueves a las 18:00 horas y por todas las plataformas de Capital 21 (señal de televisión, redes sociales y página web), se analizaron aspectos de la Guerra de 1521 y sus consecuencias más allá de la llamada “Conquista”. En este sentido, los participantes pusieron sobre la mesa la importancia de replantear la forma en que se narra este episodio tan relevante de la historia de México y conversaron sobre la forma en que la historia de la “Conquista” se ha tratado en diversas áreas del arte, como es la música, el cine, el teatro y la literatura, así como en la forma en que se presenta en exposiciones y museos.
Carlos Brokmann Haro inició la charla abordando el contexto que dio origen a la “Conquista”, en la que además de los españoles, participaron diversos pueblos indígenas que ya tenían conflictos como el imperio Mexica, como los de Tenochtitlan, Texcoco y Tlacopan, que formaron la Triple Alianza. Detalló que con la llegada de las fuerzas de Hernán Cortés (muy pequeñas) al continente americano, las disociaciones entre las comunidades indígenas provocaron una serie de enemistades internas que aprovechan los españoles y algunos de estos grupos indígenas.
Fue una lucha de cerca de 100 mil indígenas mexicas, contra alrededor de 300 mil indígenas aliados que reunía a texcocanos, zempoaltecas, tlaxcaltecas, entre otros, junto con los mil elementos que acompañaban a Cortés. Fue el fin de un imperio y el reacomodo de los grupos indígenas, explicó Brokmann Haro. Por su parte, Flavio González Mello apuntó que el tema de la “Conquista” siempre ha estado presente en las artes como en la literatura, el teatro, la pintura y la poesía, particularmente en los trabajos de los últimos 100 años a partir del régimen proveniente de la Revolución Mexicana, porque “se vuelve un símbolo muy importante de nuestra identidad cultural”.
Dijo que en el cine, la “Conquista” no ha sido un tema tan abordado, “probablemente por los gastos y la complejidad de adaptación que implica”. Asimismo, mencionó que los casos más interesantes que existen en el séptimo arte no tocan directamente los hechos sino que lo han hecho de manera tangencial. Citó ejemplos como el de los cineastas Juan Mora, Rubén Imaz y Juliette Neola, que han realizado filmes que tocan el tema de la “Conquista”, y que en contraste, otros como Orson Welles, Werner Herzog (“Aguirre, la ira de Dios”), y Francis Ford Coppola han fracasado en su intención de hacer una adaptación acertada de la “Conquista”, por lo que “hay más proyectos que se han quedado en el cajón que proyectos filmados”.
Lila Downs hizo hincapié en la importancia de pensar y narrar el pasado indígena, no precisamente a partir de la “Conquista”, porque puede ser desde antes, especialmente desde la perspectiva de las familias y comunidades indígenas porque la existencia la conciben desde la resistencia sociocultural. “Somos herederos de un pasado muy complejo, de guerras, de enfrentamientos, pero creo que sigue habiendo una resistencia, creo que somos el resultado de una resistencia maravillosa, que se refleja en el arte y en la música, por supuesto, para mí, desde la visión de las mujeres”, dijo.
El antropólogo Carlos Brokmann también habló de la romantización y la apología de la “Conquista”, una historia tergiversada desde el inicio con el mismo Hernán Cortés a través de las llamadas Cartas de Relación, con las que se creó una narrativa de hechos muy favorable a él; al igual que sucede con el Lienzo de Tlaxcala y la narrativa que favorece a la República de dicha entidad y sus cuatro señoríos. Explicó que a partir del registro práctico de estos hechos, Cortés crea una apología de la “Conquista” para justificarse ante el estado español.
“Desde el año en que empezó a registrarse ya se estaba justificando, se estaba engañando al rey (…) se estaba creando una imagen, por supuesto de los españoles, de que habían sido ellos los triunfadores”. Resaltó que la versión de Cortés y de los soldados españoles persiste hasta la actualidad, cuando la realidad es que muchas comunidades indígenas se mantuvieron en resistencia, y que incluso hoy en día algunas siguen en resistencia.
Por otro lado, explicó que la imagen de los indígenas se minimiza, como en el caso de Moctezuma Xocoyotzin (Moctezuma II), descrito como un héroe trágico, pero en el sentido europeo, que no puede hacer nada ante la superioridad de Cortés. Flavio González Mello señaló que cuando se trata la imagen de los indígenas se les da “una cualidad no humana o sobrenatural, hieráticos, incapaces del humor y el deseo, toda esta idea del indígena de piedra da una imagen parcial (…) esto puede ser denostado y vilipendiado. Ambas cosas, creo yo, le restan su esencia humana”.
También apuntó que los mestizos defendían la postura de que eran descendientes de los españoles, y que es una idea que ha permeado hasta nuestros días. En este sentido, Lila Downs explicó que existe una pobreza de orgullo en las mismas comunidades indígenas, parte de ello se refleja en los fenómenos migratorios, como se ve en la región mixe de donde es originaria. “Me di cuenta que hay una pobreza de orgullo, una falta de identificación de las raíces y las narrativas originarias”, expresó.
Para enfrentar este sentimiento y aportar algo a su pueblo indígena como a todas y todos los mexicanos, Lila compuso canciones que rescatan historias y personajes plasmados en uno de los únicos códices de la cultura mixteca. “Yo traté de componer canciones que se basaban en los personajes de los códices mixtecos, es un disco que hicimos hace tiempo, que se llama Yutu Tata (Árbol Padre), que se basa en la visión del génesis, de nuestros ancestros que van naciendo según uno de los pocos códices que sobreviven, el Códice Vindobonensis, en donde se muestra un árbol donde va naciendo la humanidad, los mixtecos”, detalló.
Desde su perspectiva como cineasta, Flavio González Mello afirmó que “el arte debe ser plural, y que no le podemos exigir al arte lo que le toca a la Secretaría de Educación Pública”, no obstante, aseveró que en el arte se vale de todo porque lo enriquece. En tanto, desde su visión de escritor considera que “te tienes que poner en los zapatos de los conquistados, de los conquistadores y de los que atestiguaron para poder contar desde todos los puntos de vista”. También se refirió al cine indigenista, mencionó que el cine ha cambiado mucho en los últimos años, y que “actualmente hay mucho cine que retrata los pueblos indígenas, hay cine hecho por indígenas con la accesibilidad que hay”. Expuso que cineastas como Nicolás Echeverría han documentado de manera muy importante a los pueblos indígenas, así como Juan Mora, haciendo sus películas en purépecha en nahuatl”.
Finalmente consideró que en las escuelas de nivel básico debería existir una materia dedicada a las lenguas indígenas, así como hay una materia específica para matemáticas, español e inglés. Destacó que las lenguas indígenas son lenguas vivas, a diferencia del latín que es una lengua muerta y que se estudia en países de Europa. “Y no es una, en realidad son decenas, y creo yo que si en cada zona se enseñara al menos una de las lenguas de esa zona, eso garantizaría que esa parte de la cultura que se condensa en el lenguaje sobreviva”, señaló. El historiador Brokmann Haro también se refirió a la importancia de promover la igualdad y el respeto a las personas de origen indígena, desde dos líneas, la legal y de derechos humanos como desde la perspectiva histórica y cultural. “Las políticas públicas deben promover que debe haber una igualdad, como en los casos legales y judiciales, por lo que señala se deben construir las condiciones que acompañen a las personas indígenas con peritos y abogados traductores”, sugirió.
En el sentido cultural, Carlos Brokmann habló de la importancia de la narrativa que se cuenta y observa en museos, como en el Museo de Antropología de la Ciudad de México, en donde sobresale la narrativa mexica, por lo que consideró que la Secretaría de Educación Pública debe analizar esta línea y contarla desde la pluralidad. Los “Jueves de Debate” se transmiten en Capital 21 (21.1 de televisión digital abierta, así como en el 21 de HD IZZI y Totalplay) y su nueva página web (www.capital21.cdmx.gob.mx). Asimismo, todos los episodios podrán disfrutarse en directo a través de las redes sociales del medio público de la Ciudad de México: Facebook (@Capital21), Twitter (@Capital_21) y YouTube (Capital 21). También se puede seguir la transmisión por las redes sociales de Canal 11 y Canal 14, medios públicos que impulsan el acceso a la información y contenidos de calidad para la ciudadanía.
La programación pendiente es la siguiente: – 12 de agosto. Pueblos originarios de Anáhuac. El valor de la palabra y sus derechos en la Constitución de la Ciudad.
Semblanza de los ponentes
Lila Downs Sánchez. Estudió antropología social y canto en la University of Minnesota en Minneapolis, Estados Unidos. Hizo su tesis de licenciatura sobre simbolismo del textil indígena Triqui: “Los motivos de las Mariposas, Representación Femenina y Resistencia Cultural en los Huipiles de San Andrés Chicahuaxtla, Oaxaca. Ha escrito algunos artículos sobre la música y su contexto social, así como de género, invitada a escribir sobre la arqueología de la comida Oaxaqueña.
Su aculturación indígena mixteca, genera la importancia de portar los textiles indígenas de su estado, al cantar como una forma de resistir el legado occidental. Al tener padre norteamericano, el tema mestizo, fronterizo y transnacional ha sido de importancia en sus composiciones musicales y la relación discriminatoria y racista entre la cultura nacional mexicana y México-Americana en Norte América. Como autora ha recibido seis Grammys, es el galardón más importante en las artes de la música.
Flavio González Mello. Es escritor y director de cine, teatro y televisión; miembro fundador y expresidente del Colegio de Arqueólogos de México (2002-2005). En su trabajo como dramaturgo destacan las obras ‘1822, el año que fuimos Imperio’ (2000); ‘Lascuráin o la Brevedad del Poder’ (Premio a la Mejor Producción Nacional de la Asociación Mexicana de Críticos de Teatro, 2005); ‘Olimpia 68’ (2008); La vida difícil de Guadalupe Reyes (2011); El Tirano Banderas (Adaptación de la novela Homónima de Valle Inclán, estrenada en el Teatro Español de Madrid 2013 bajo la dirección de Oriol Broggi).
Entre los reconocimientos que ha recibido se encuentran el Ariel de la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas, la Distinción Universidad Nacional para Jóvenes Académicos en el área de Creación Artística otorgado por la UNAM, el Danzante de Oro del Festival Internacional de Cine de Huesca y el Premio Nacional de Dramaturgia “Juan Ruiz de Alarcón” del Instituto Nacional de Bellas Artes. Actualmente es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte.
González Mello es profesor de guión y teoría dramática en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la Universidad Nacional Autónoma de México y en el Centro de Capacitación Cinematográfica del Centro Nacional de las Artes. Carlos Brokmann Haro. Es Licenciado en Arqueología y Doctor en Antropología por la Escuela Nacional de Antropología e Historia; asimismo es pasante del Doctorado en Historia de El Colegio de México.
Actualmente es Investigador en Derechos Humanos Titular B del Centro Nacional de Derechos Humanos de la CNDH y Miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Sus principales líneas de investigación son “Seguridad, Violencia, Combate a la Delincuencia y Derechos Humanos”, así como “Antropología y Pluralismo Jurídico de los Grupos Indígenas de México”. Entre sus libros destacan ‘La flecha dorada. Pluralismo y derechos humanos en los sistemas jurídicos de Mesoamérica’; ‘Hablando fuerte: antropología jurídica comparativa de Mesoamérica’; ‘La estera y la silla. Individuo, comunidad y Estado entre los nahuas’; ‘Orígenes del pluralismo jurídico en México. Derechos humanos y sistemas jurídicos indígenas’; ‘La justicia en el México prehispánico’.
Ha recibido distinciones nacionales e internacionales como el Premio Fray Bernardino de Sahagún (Etnología y Antropología Social 2013), el Premio Antonio García Cubas (Difusión en Ciencias Sociales 2001), el Premio Alfonso Caso (Arqueología 1996), y el Premio Palenque (Área Maya 1995). En el debate, se contó con la presencia de Vannesa Bohórquez López, titular de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.