Por Ariadna Arizmendi / Corresponsal
ZOZOCOLCO, Ver.- Uno de los muchos atractivos del estado de Veracruz son sus Pueblos Mágicos, y Zozocolco de Hidalgo es uno de los sitios imperdibles para realizar un trip que mezcle tradición y ecoturismo. Zozocolco se localiza a cinco horas de la Ciudad de México y se caracteriza por estar encallado en la sierra del Totonacapan, el corazón de una de las culturas prehispánicas más importantes de México, este pueblo también es llamado “Tierra de los Cántaros de Barro”, que es el significado de su nombre en lengua náhuatl.
Para explorar este bello rincón veracruzano, se debe empezar por el Centro Histórico, que preserva su legado colonial en la Parroquia de San Miguel Arcángel,
edificada alrededor del año 1600 en el Cerro de las Golondrinas. Sus calles, acogedoras y empedradas invitan a recorrerlas y a descubrir en ellas otras expresiones culturales, como las artesanías, gastronomía y productos locales como café y vainilla.
Para apreciar la comunión entre las casas, edificaciones y el entorno natural de las serranías, no dejes de visitar el Mirador del Curato, que tiene la vista panorámica más privilegiada de Zozocolco. La naturaleza es una característica de la región, por lo que a los amantes del ecoturismo les encantará hacer una visita a sus hermosas cascadas y pozas, de aguas cristalinas color verde esmeralda, enmarcadas por impresionantes formaciones rocosas.
En el entorno de Zozocolco podrás encontrar las tranquilas y apacibles cascadas del Callejón y “La poza del Diablo”, esta última nombrada así por la leyenda de que en tiempos prehispánicos, el diablo se apareció ahí, derrotado por un indígena totonaco. Uno de los cuerpos de agua más hermosos por naturaleza es la Poza El Caliche, una formación rocosa con un túnel o arco natural donde el agua esmeralda y cristalina alberga tortugas y acamayas.
En el Centro Ecoturístico Los Cántaros del Sol, se ofrecen recorridos guiados a los diferentes cuerpos de agua de la región, y, además, puedes complementar la experiencia con recorridos guiados de senderismo hacia la sierra, visitas a los cultivos agrícolas locales, experiencia en temazcal, tirolesas, puentes colgantes y campamento al aire libre.
Finalmente, la gastronomía de Zozocolco también es toda una experiencia, la magia reside en los platillos caseros de la región como el mole, los molotes, los quelites, la barbacoa, las mojarras, los empapelados y las gorditas de plátano.
Poseedor de un clima templado la mayor parte del año, Zozocolco de Hidalgo cuenta con hospedaje para todos los niveles, y es una clara invitación a explorar el México más pintoresco y auténtico, además de que incita a descubrir las maravillas naturales y tradicionales que viven en tierras veracruzanas.